Disociación de la materia y la energía.

La mente recorre distancias inmensas en el tiempo que toma decir una palabra.
Lugares exóticos, ideas visionarias, sueños etéreos, momentos fantásticos.
Vuelo lúdico sin costo... ni destino material. Segregación del cuerpo y la mente.
Ejercicio cuyo único fruto es el placer, y única manifestación concreta es el aislamiento
temporal de la flama eterna.
Si tan solo este vial pudiera seguir la volatil esencia.
Atrapado en dos mundos por la dicotomia de la existencia en el otro.
Ansía inmanente que no encuentra descanso hasta el día en que el tunel llega a su fin.
Pugna vehemente dentro de mí. Ruge y grita, pero no puede salir.

Sujeto 204.
Así que el mundo, a pesar de todo, se mueve no por el efecto de cada individuo sino por la desición de un líder. Una persona es todo lo que se necesita. Personas comprometidas, apasionadas, curiosas o ávidas.
Esto ha sido explorado ya muchas veces. Pero cual es el rol del seguidor. Donde radica la falla de quien no siente pasiones. Donde perdió el valor el ícono estóico que tiende la mano a quien la requiere sin rendirse hasta dar a todos lo que piden. Cuando su trabajo termina, el no pide. Deber cumplido. Como el niño que termina sus tareas domésticas y escolares, pero contrario a este no hay pasión que lo motive a jugar.
Repitiendo lo que la sociedad dicta. Fuera de ella, puesto que se esfuerza por integrarse al grupo que no pertenece. Todo es la copia de una copia. No hay voluntad propia. Utiliza su propia razón para convencerse, falsamente, de ser original. Diferente no es original. Es necesario adaptar su natura, pero hace lo mismo.
Monotono como este texto. Emociones opacadas. Amortiguadas. Lejanas. Esta criatura ama a la humanidad, pero no puede relacionarse con ella. No empata, no corresponde. Parece ser que su único afán es el bienestar del pueblo. Ignoro hasta que punto o cuanto más pueda sostenerlo. Desconocido también si es un impulso verdadero u otra adaptación de supervivencia. Mero instinto. Similar a un autómata.
Frío y congelado es el aire. Aprender para funcionar mejor. Fascinante especimen, del que quiero una descripción más exacta y objetiva.

Caer.
Orgullo? No ahora.
Te falle, compañero. Debí estar allí mil veces y no estuve.
La emoción de volar solo me hizo olvidar a quien más necesitaba de las alturas.
Darse cuenta que arriba es abajo es lo más doloroso. ¿Golpeé con el techo?
No, es el suelo. Sabía que el cielo no podía ser tan gris.

De nada sirve ser hábil si fallas bajo presión. Es igual que no tener pericia.
Ni destreza ni virtud. El error.

Llueve, y que lluvia.
Pudiera decir que llueve y mi cuerpo llora, mi ser entero. Desgarrando las entrañas.
Que al lavar la tierra también se lava mi ilusión, que se pierde mi porvenir en la bruma de la tarde. Me busco en los ríos para encontrarme en cayendo en pedazos. Chocando mil veces sobre el suelo, estallando con gritos de dolor en cada impacto, para así formar charcos con mi pesar.
Pero por poético que suene, no es cierto. La verdad es que está es mi clase de lluvia. Reparadora, vibrante, completa. Cada gota una caricia que me reconforta. Deslavando poco a poco mis heridas para mostrar algo más fuerte que yacía debajo desde el comienzo. Bruma que enaltece la fuerza de mi ser como lo hace con la majestuosidad de la montaña. Cada gota es la explosión del éxtasis, liberando la alegría de la vida que se ocultaba en el corazón de la gente fría. Formando un todo que me alivia.

El cielo cuenta con 7 pilares que lo mantienen en su lugar. Así es, solo 7 puntos fijan todo el universo. La osa mayor: Dubbhe, Merak, Megrez, Ariotto, Phecda, Benetonash, Mizard/Alcor.
Yo no tengo un solo pilar. No tengo de que sostenerme. Navego Sólo; envuelto en el mar de la sociedad. Sin conocer a nadie, pero familiarizado con todos. Azul profundo visible pero indiferenciado. No hay sustento. Con lo único que cuento es con la balsa que yo mismo me proveo. Lo único a lo que puedo aferrarme. Sin embargo, cuento con algo más importante que 7 pilares: 7 repiraderos. Lugar donde salir a la superficie y tomar aire si me vuelco entre las olas y el rugir del azul intenso.

1 Mente fría y corazón tibio. S
2 Alegre nobleza disfrazada de seriedad. E
3 Fuego de la vida que ilumina con jovialidad. M
4 Inteligencia y desahogo. Descanso del alma. F
5 Sangre densa y joven. Temeroso pero enamorado de la vida J
6 Romántico envuelto en sábana de fiesta E
7 Guerrera que vibra con su propia tonada C

Mi propia constelación me mantiene lejos de hundirme bajo cualquier circunstancia. No los tengo a mi lado todo el tiempo, pero el día y las nubes ocultan a las estrellas. No sé si algún día pueda volar, pero no desfalleceré aunque el tratar de encajar me agote totalmente. No pretendo ser soberbio al decir que lucho sin ayuda y vivo por lo propia motivación y fuerza, pues cuando se acerca el olvido 7 personas me hacen recordar el sol.

Ira. Pura, libre, desenfrenada, desbordante. ¡Ah, mujer que hiere! No estoy acaso allí cuando me llamas. Y también cuando no lo haces. Compadezcance, ángeles, de mí pues este demonio drena mi pecho de toda vida y lo llena de calor corrosivo. Me destruye desde adentro, cuando la afrenta viene desde afuera. El hombre estúpido que siempre cede, el monigote con piel de trapo y corazón comprensivo. No, no comprensivo; sino vacío, oculto, pisado y humillado. Rencor que por primera vez me haces sentir. A tí que te adoro y solo creí poder sentir cálida ahora siento ardiente, pero ardiente de dolor y coraje. Y no me culparé a mi, te culpo a tí. Te culpo de predicar que me quieres y atravesarme con la espada de tu menosprecio. No pido un pedestal, solo un sitio. Un lugar que se me respete.
Linda, a pesar de todo lo que te quiero hoy solo pienso en ti con disgusto. disgusto visceral. Trato de tragar mi orgullo y no achacarte este mal, pero siento ser débil y no poder. Espero, que dentro de tus amigos recuerdes que tienes quien por tí vele noche y día aunque viva relegado a la sombra de tu recuerdo.

Aún así, te dedico un beso, que aunque demuestra lo mucho que te quiero, hoy esta manchado.

Aún en la desesperación guardo la fé. Si un mar negro me rodea, solo dejo brillar la luz de mi pecho. Aún entre mil demonios que quieran roer mis huesos conservo mi terreno. Ni un paso atrás he de dar frente al mal. Padre, permíteme ser incorruptible, inquebrantable, presto. Que el mal me perciba como invencible.

Como hombre soy cien por ciento falible. Débil, maltrecho, frágil... la sombra de la divinidad. Como enviado de la justicia, como defensor de los hombres soy el reflejo del enviado sobre la Tierra, pues todo aquel que haga Su voluntad también porta Su protección. No desfalleceré nunca, pues mi misión es respaldada por la bondad del universo. Mientrás crea que mi causa es justa y que sea siervo y guerrero la ilusión de ser grande no impresionará a nadie, pero me dará la fuerza y valor para lograr grandes empresas.

La grandeza de la humanidad no viene de el hombre, si no de lo que esconde dentro. Liberaré mi musa interior, ella me guiará sin falla. Con pasión he de luchar hasta que mis brazos sangrantes no se puedan levantar, hasta que mis ojos cansados no se puedan abrir, hasta que mis piernas se doblen de dolor, y mi corazón deje de latir.
Enciéndan su espíritu con el mío y levantense siempre que caigan, sigan sus sueños como yo seguiré los mios.

Me haces tanta falta. Soy un tonto sin canción, un testarudo falto de toda sensatez.
Me empeño en crear un castillo sobre suelo imposible, sin cimientos ni bases. Incluso un
palacio en las nubes tiene raíces más estables que el gámbito que pretendo realizar. Peón a reina ocho. Que puede sentir la reina por el peón sino indiferencia. Ni le va ni le viene, pieza inútil. Otra movida de una pieza ya perdida. Cuantos movimientos antes del mate, ya estuve mucho tiempo en jaque.

Fiel cual perro. Manso como oveja. Esperándote con abnegación. Ya es hora de buscar otra dueña, una que me cuide y que me quiera más que tú. Debo traicionar tu memoria, pero es lo que más amo en este instánte. Veo tanto en tus ojos. Es una novela que busca ser escrita. No, es un drama que será puesto en escena. Sin embargo, claramente es obra de la ficción. Ignoras cada señal del guión como si solo fueras tu la dueña.

Pues bien, recuerda que te adoro, recuerda que me vuelves loco. Y sobre todo, recuerda que cuando me busques estoy aquí para servirte a tí más que a nadie.